Duerme en un hotel de mil estrellas
Pasarás dos noches en el desierto de Wadi Rum, durmiendo en una cueva como auténtico beduino, al calor del fuego, recordando de dónde vienes y retornando a los orígenes. La tierra y el fuego serán los elementos que nos acompañarán en este inicio de la aventura al ritmo de una melodía árabe que te hará vibrar, para conectarte a lo esencial y vivir en la mística de lo sencillo, del presente, del palpitar al unísono con la existencia. En esta etapa de tu viaje nómada no tendrás muchas comodidades, pero será todo un lujo darte cuenta de lo poco que realmente necesitas para sentirte pleno.